Directora Nacional de Solidaridad e Iniciativa Social Comisión de Libro “Historias de Éxito” AMEXME

Socia fundadora y miembro activo durante 19 años del Club Rotario Xalapa Manantiales, con una participación constante en diferentes áreas y responsabilidades tales como: La recaudación de fondos y atracción de nuevos socios, la cual ha ayudado al crecimiento del club y a la consolidación de sus procesos. En el club, he ejercido distintos puestos: presidenta del comité de proyectos de servicio; presidenta del comité de Fundación Rotaria por tres años; presidenta del comité de administración, secretaria, tesorera y maestra de protocolo del club; presidenta de la Avenida de Servicio Internacional.
Lulú, dice con orgullo que “creció entre costuras”. Vivió rodeada por los primeros pantalones de mezclilla de Veracruz que su padre vendía en la tienda departamental” El Vaquero Norteño” y las telas de vestidos de ceremonia, sobre todo de novias, del negocio de su mamá, La Elegancia, ambas en Xalapa.
Durante treinta años Lulú se dedicó a ejercer como cirujano dentista, siempre de manera particular y disfrutando al máximo de su vocación.
Decidió poner un negocio, tomó la opción de lo que ya conocía: los vestidos de novias. La madre de Lulú estableció su tienda La Elegancia en la década de los cincuenta y la convirtió en una tradición para las novias veracruzanas: “vestía a todas las novias de Xalapa y la región con vestidos de moda a gusto del cliente con materiales nacionales e importados…
En el año de 1976, la tienda pasó a las manos de Hilda, hermana de Lulú, quien la sostuvo hasta que cerró. A la par, a partir de 2003, Lulú abrió la primera sucursal de Divega Ceremonias, su propio negocio del mismo ramo, con lo que le dio continuidad al linaje familiar de vestir a las mujeres casaderas de Veracruz. A diferencia de La Elegancia, ya no tiene un grupo de costureras solo a su servicio, sino que cuenta con algunas externas e importa vestidos primero de Estados Unidos y Malasia, y ahora incluso de la convulsa Ucrania, proveedor que no ha querido suspender pese a la guerra.
La empresaria dice sin titubeos que su otra vocación es la de ser rotaria, grupo al que se integró en la década de los ochenta. Su disposición por el servicio es algo que ha podido también poner en práctica en la Asociación Mexicana de Mujeres Empresarias, AMEXME Nacional A.C. desde que es asociada en 2013, pues fungió como directora nacional de solidaridad, además, fue presidenta del Capítulo Xalapa de 2016 a 2019.
Esta pasión por el servicio es algo que Lulú ha podido poner en práctica también en su vida profesional, tanto en la odontología como en la venta de vestidos de ceremonias. Al preguntarle por la importancia de las emociones como empresaria, responde sin dudarlo que atiende a gente feliz. Y esto es crucial en su vida. La felicidad de sus clientas es su felicidad y cada día trabaja para ver a una persona con una sonrisa, pues en Divega Ceremonias, la novia es el centro de atención.